¿En verdad beber jugo de manzana natural te ayuda a mantener una buena salud? La respuesta es un absoluto y rotundo sí.
Cuando de cuidar mi salud se trata, escojo el camino más natural posible. Si contraigo un resfriado mi primera opción es tomar agua caliente con limón. Para el dolor de garganta una infusión de hojas de higo. ¿Dolor de cabeza? Un par de gotas de aceite esencial de lavanda en las sienes y asunto arreglado.
No tengo una guerra declarada contra la medicina occidental, pero prefiero que sea mi último recurso. Mientras menos químicos y medicamentos artificiales introduzca a mi cuerpo, mejor.
Uno de los aprendizajes más valiosos que esta política personal me ha dejado, es que prevenir siempre tendrá mejores resultados que reaccionar.
Una de las claves para prevenir inconvenientes de salud se encuentra en la alimentación balanceada. Dado que tengo debilidad por los alimentos dulces, una forma de lograrlo es incluir variedad de frutas en mi dieta diaria: enteras, en jugos, licuados y smoothies.
La manzana y la salud
Una de las frutas que más me gusta consumir es la manzana. No es casualidad aquel viejo refrán que indica “An apple a day keeps the doctor away”, es decir, una manzana al día mantiene al doctor lejos.
Sucede que las manzanas son muy buenas para la salud. Su carga de antioxidantes es de las más altas entre las frutas, asegurándose que nuestro sistema inmune se mantenga funcionando con la precisión de un reloj suizo. Además, son los encargados de retrasar la aparición de los signos de la edad. ¿Y quién no quiere una piel joven y radiante?
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El jugo de manzana
Todos los beneficios de las manzanas puedes obtenerlos al comerlas enteras o al beber su jugo. Ten en cuenta que esto solo aplica si tu jugo es natural y no incluye azúcares añadidos.
Para no perder la fibra de la manzana, siempre te recomiendo que optes por la licuadora sobre el extractor de jugos. O que aproveches la pulpa que separa el extractor para hacer alguna salsa o postre.
Ahora, ¿cuáles son estos beneficios de los que hablo? Para empezar, se reduce el riesgo de padecer diabetes al beber jugo de manzana diariamente. Su fibra soluble es la calve para mantener a raya los cambios drásticos en los niveles de colesterol en nuestro organismo.
Estudios han encontrado que el jugo de manzana está relacionado con actividades antimutágenas (previene mutaciones en las células que pueden terminar en cáncer), antioxidantes y antiinflamatorias. Son muchos “antis”, pero todos buenos para nuestro cuerpo.
El jugo de manzana ayuda aprevenir el asma, protege la salud del hígado y el corazón, reduce los niveles de colesterol y mantiene los huesos fuertes. Ayuda a neutralizar el síndrome de colon irritable, es efectivo para combatir tanto la diarrea, como la constipación intestinal.
Incluso, puedes obtener grandes beneficios del jugo de manzana sin siquiera beberlo. Hay quienes lo aplican en la piel y cabello para tratar condiciones como picazón, inflamaciones, piel agrietada, acné y caspa. Personalmente nunca he probado estas propiedades tópicas del jugo de manzana, pero si me animo prometo contarles los resultados.
Mientras tanto, te dejo la invitación para que incluyas manzanas en tu dieta. El jugo es una opción muy buena si tus rutinas son agitadas y buscas una solución rápida, a mí siempre me funciona.
-Ivette González: comunicadora social, cocinera profesional, en búsqueda constante de un estilo de vida natural y saludable.